
El Modelo de la Ocupación Humana (MOHO) de Gary Kielhofner, en Terapia Ocupacional, describe a las personas como seres ocupacionales que participan en actividades significativas para lograr identidad, competencia y adaptación.
Este modelo, que se aplica a cualquier persona con dificultades en su vida ocupacional, considera tres componentes interrelacionados: la volición, la habituación y la capacidad de desempeño, además del entorno.
Componentes del MOHO:
Volición: Se refiere a la motivación intrínseca de la persona para participar en ocupaciones, incluyendo sus intereses, valores personales y expectativas de eficacia.
Habituación: Organiza patrones de comportamiento y rutinas, estableciendo hábitos y roles que influyen en la forma en que las personas se involucran en actividades.
Capacidad de desempeño: Se refiere a las habilidades físicas y mentales que permiten a la persona realizar tareas y participar en ocupaciones.
Entorno: El entorno físico, social y cultural influye en la participación ocupacional de la persona, proporcionando oportunidades y restricciones.
Aplicación del MOHO:
El modelo proporciona un marco para evaluar y comprender cómo estos componentes interactúan y afectan el desempeño ocupacional de una persona. Permite a las terapeutas ocupacionales diseñar intervenciones personalizadas que promuevan la adaptación, la competencia y la identidad de la persona. Se utiliza para identificar áreas de dificultad en la participación ocupacional y desarrollar estrategias para superarlas.
En esencia, el MOHO ayuda a las terapeutas a comprender cómo las personas se involucran en actividades significativas y cómo pueden alcanzar un mayor bienestar a través de la ocupación.
¿Y tú qué opinas?